Con la finalidad de contrarrestar la contaminación emitida por los buques de carga y perfilando la industria con miras al futuro fue creado el Yara Birkeland, un buque autónomo y eléctrico que promete revolucionar este tipo de transportación reduciendo el impacto directo hacia el medioambiente.

Este carguero fue diseñado para reducir las emisiones de óxido de nitrógeno, gases de efecto invernadero, así como para reducir también las emisiones de dióxido de carbono, usando energía eléctrica en lugar de combustibles fósiles.

El Yara Birkeland no contará con tripulación a bordo, siendo dirigido por tres centros de control en tierra. Lanzado en 2018 fue desarrollado por la empresa noruega dedicada a la industria agrícola, Yara International, y su creación ya ha sido denominada «el Tesla de los océanos»

Cuenta con capacidad para cien contenedores y su recorrido será posible gracias al uso de GPS, radares, cámaras y sensores de navegación. 

Su costo circula cerca de los veinticinco millones de dólares, casi tres veces más que un buque regular del mismo tamaño, sin embargo los inversores están seguros que al restar gastos de combustible y recursos humanos los gastos anuales se reducirían un noventa por ciento.

Si bien no es el primer barco autónomo, pues en 2018 Finlandia lanzó un ferry con características similares, se asegura que sí es el primer buque carguero de su especie.

Se prevé que Yara International invierta en el futuro en buques más grandes y los use para transportar sus productos en rutas aún más largas, una vez las regulaciones internacionales se los permitan.  Por lo pronto este buque haría su primer viaje entre dos ciudades noruegas antes de que finalice el año, manteniendo la promesa de no contar con tripulación a bordo.